«El universo llena el vacío siempre, cuando liberas lo viejo, lo caduco, haces espacio en tu vida para nuevas y mejores experiencias.»
Nuestra existencia implica movimiento, cambio, transformación, vivir es un eterno morir y renacer, a cada instante estamos rehaciéndonos, construyéndonos, ante la contracción y expansión de la existencia nos encontramos en la infinita e indetenible evolución universal.
Si miramos un poco dentro, si miramos un poco atrás, nos damos cuenta de que lo que somos hoy se construye a medida que dejamos atrás el ser que un día fuimos, niños, jóvenes, adultos, viejos, almas, otras vidas, un recorrido ancestral lleno de experiencias y sabiduría nos anteceden, sin embargo, lo único verdadero que podemos tener es este instante, llámalo sagrado o no, llámalo la eternidad o no, pero esta respiración, este instante pasajero es la vida.
Cuando damos una mirada astrológica a nuestra existencia, nos damos cuenta de que atravesamos la rueda zodiacal una y otra vez, pero siempre es diferente ese paso, no en vano volver a pasar por nuestro punto de origen le llamamos una nueva vuelta al sol, comenzamos un nuevo ciclo, es un nuevo cumpleaños.
Vivir es cambiar, es transformarse, es evolucionar, es experimentar, es crear, es expresarse, comenzamos un nuevo ciclo a cada instante, ahora mismo están pasando cosas increíbles, en nada se va el sol del signo de cáncer (donde nos movimos desde lo interno) hacia el signo de leo, donde sentimos ganas de brillar y compartir, nos movemos desde el corazón hacia aquello que nos llama.
Un nuevo ciclo de lunas y soles, de eclipses, anuncian nuevos tiempos, el gran espíritu nos van susurrando ve soltando que viene algo totalmente distinto… y así comprobamos que cuando abrimos espacio, el universo voltea a mirarnos para darnos algo más de aquello que es mejor para nosotros, de aquello que nos empujar a evolucionar, de aquello que nos hace sacar a la luz lo que somos, lo más auténtico, lo más poderoso, lo más brillante… desde allí damos al mundo ese algo que nadie más puede dar, desde allí cumplimos con la misión del alma y desde allí expandimos la existencia… hagamos espacio, lo que viene es totalmente inesperado!