El sexto chakra, Ajna, se encuentra en el área del tercer ojo, que se localiza en el espacio entre las cejas.
Abarca la glándula pituitaria, los ojos, la cabeza, y el cerebelo. Un tercer ojo, invisible pero poderoso, es el centro de la intuición. El chakra espiritual Ajna, que significa “más allá de la sabiduría”, te lleva hacia el conocimiento interno que te guiará si se lo permites. Un sexto chakra equilibrado permite la clarividencia, la telepatía, los sueños lúcidos, amplía la imaginación y la visualización.
El sexto sentido
El mundo se experimenta a través de los cinco sentidos. Incluso antes de nacer, escuchaste ruidos como voces y los latidos del corazón de tu mamá, además de los sonidos apagados del mundo exterior. Experimentaste el tacto, el gusto e incluso pudiste percibir la luz. Y desde el momento en que naciste has atribuido tus experiencias a lo que perciben tus sentidos. Has aprendido a confiar en tus sentidos, en lo que puedes degustar, oler, tocar, ver y escuchar. Aunque la percepción sensorial es grande en experiencia de vida, también es limitante a la hora de expandir tu conciencia.
Hubo un tiempo en el que dependías de tu sentido de la intuición y el conocimiento interior. Antes de la tecnología moderna, tuvimos que confiar en las señales del medio ambiente y un instinto más primordial para guiarnos. Al igual que las aves pueden presentir cuando un tsunami podría golpear la costa o las ardillas saben que es el momento de reunir alimentos para el invierno, los seres humanos también tienen un sentido intuitivo. Lo que sucede es que hemos perdido contacto con él, así como con nuestra capacidad de confiar en él.
Siente tu camino a la intuición
Tus sentidos físicos pueden darte pistas sobre cómo seguir tu intuición. Por ejemplo, ¿alguna vez has tenido la sensación de que la leche en un empaque estaba echada a perder? Hueles la leche, revisas la fecha de caducidad que es en un par de semanas y hasta les preguntas a todos en casa: «¿sirve la leche?”. Pero, al no detectar nada concreto, la bebes y luego sientes un fuerte dolor de estómago. Eso es porque a un nivel muy sutil, tu sentido del olfato detectó algo que no estaba bien y te dio una indicación que tú pusiste en duda.
Aquí hay otro ejemplo: estás haciendo un trato comercial con alguien y todo parece ir bien. La persona parece buena y honesta. Pero al momento de estrecharle la mano, sientes que algo no está bien. Cuando llevan a cabo el trato, te das cuenta de que era corrupto.
Percibes estas pistas a través de tus sentidos, pero cuando hay algo que no está a la vista tiendes a ignorarlo. La buena noticia es que puedes aprender a confiar en esas pistas y tomar mejores decisiones basadas en tu sentido intuitivo. Cuando tus decisiones estén en lo correcto, escríbelas para reforzar que tu intuición te guió en la dirección correcta. Recuerda que, al igual que los animales en el bosque, tú también has tenido este sexto sentido siempre; simplemente necesitas encontrarlo de nuevo.
Pide a tu sabio interior que te guíe
También puedes utilizar tu sentido interior para pedir orientación y así tomar las decisiones correctas. Ya cuentas con tu mente, intelecto y ego, y ahora también estás incluyendo a tu alma en el proceso de tomar decisiones. Y así como recurriste al tercer chakra en la zona del plexo solar para que te guiara a través de la comodidad o la incomodidad, prestarás atención a una corazonada o una sutil sensación que te hace ir hacia adelante o retroceder. Si no sabes qué hacer, pide a tu sentido de la intuición que se abra a fin de ayudarte a tomar la decisión correcta.
Cómo equilibrar el Ajna
Al igual que cualquiera de los chakras espirituales, Ajna se equilibra mejor a través de la meditación. A menudo, los meditadores novatos dicen sentir una sensación de cosquilleo en el tercer ojo o creen que les duele la cabeza. Un hormigueo o una sensación palpitante alrededor de la zona del tercer ojo durante o después de la meditación es un signo de que se está abriendo este chakra que está bloqueado.
Hay una maravillosa técnica de respiración Pranayama que se conoce como Brahmari o la respiración de la abeja. Lleva ambas manos a tu rostro. Coloca los dos dedos medios sobre tus ojos. Deja que los índices toquen las cejas y los meñiques estén debajo de los pómulos. Cierra los oídos con los pulgares. Inhala profundamente y exhala la palabra AUM, haciendo énfasis en el sonido «M», mientras creas un sonido de zumbido parecido al de una abeja. Hazlo por dos minutos o más. Puede aliviar la tensión en la cabeza y trabaja para abrir el sexto chakra.
Asanas, sonidos, colores y gemas
Cualquier asana de yoga en la que se presiona la frente es buena para el sexto chakra. Intenta con la postura del niño (Balasana) con la frente en el piso o en un bloque de yoga. La postura del delfín es otra postura que ayuda al momento de levantar la cabeza para ver hacia el piso.
El color del sexto chakra es el índigo y el sonido del mantra es SHAM.
Las gemas que ayudan a abrir el chakra Ajna son la amatista, el lapislázuli y la azurita.
Fuente: Michelle Fondin via Meditación Chopra Center