Te has encontrado en la interrogante de ¿porque me pasa esto a mí? ¿Porque vivo esta experiencia? Te has encontrado diciendo: ¿qué? esto yo no lo hago nunca en la vida! y después te encuentras viviendo exactamente esa experiencia?
Estas interrogantes provienen de la mente, del ego, nunca del alma, es el alma la que sabe cuándo y cómo es el momento adecuado para que vivas la mejor experiencia que puedas vivir para tu propia evolución. Y “mejor” no quiere decir que sea la que más te gusta, mejor quiere decir la que más te conviene.
Cada vez estoy más convencida que los encuentros que tenemos con otros no son casuales, que las decisiones que tomamos llamadas erradas o acertadas, son productos de la resonancia de las memorias que vibran en nuestro campo de energía. Con cada ser, con cada experiencia, aprendemos algo, con cada encuentro y experiencia develamos algo y ponemos orden liberando memorias de dolor o del pasado y evolucionando.
A eso vinimos, a aprender, evolucionar y expandirnos, que privilegio hacerlo en la tierra y en cuerpos tan maravillosos. Hoy no te culpes, no te juzgues, no te repitas nada negativo sobre ti mismo, ninguna acción es completamente buena ni completamente mala, simplemente es, nada ni nadie puede impedirlo, es efecto de una causa. Lo que si es importante es que hoy seas consciente de que nuevas “causas” quieres construir para tener una vida mas pacifica, mas plena y mas feliz.
