Para los venezolanos hacer hallacas es sinonimo de unión y alegría. Nuestras hallacas son originalmente carnivoras, pero las versiones que fueron apareciendo a través del tiempo nos lleva a hallacas de pescado, pollo y las que presento hoy, que son igualmente deliciosas: vegetarianas.

De la mano de un buen vivir y un buen comer no dejamos los ritos y tradiciones familiares y gastronomicas, pero una transformación de este plato a una versión más amable le abre la puerta a los muchos vegetarianos que hoy comparten la mesa.  Te dejo mi receta.
Quedan riquisimas!

Ingredientes para el guiso

1 taza de pimentón rojo

1 taza de pimentón verde

1 taza de celery picadito

1 taza de ají dulce

1 taza de cebolla picada finamente

1 taza de cebollín picado finamente

2 cabezas de ajo trituradas

1 taza de ajo porro picado en rueditas

2 tazas de calabacín en cuadritos

2 berenjenas peladas y en cuadritos

1 zanahoria en cuadritos

4 tomates sin piel ni semillas cortados en trozos

Pimienta recién molida al gusto

Alcaparras

Aceitunas

Pasas

Papelón al gusto

Sal al gusto

Vino al gusto

Ingredientes para la masa

1 paquete de harina de maíz amarillo (o 1 kg de masa de maíz pilado fresca)

Aceite con onoto

Sal

Agua

Ingredientes para el adorno

Pasas

Alcaparras

Aceitunas rellenas con pimentón

Ruedas de cebolla

Julianas de pimentón

Si gustas garbanzos hervidos, almendras tostadas.

Para envolver las hallacas

60 hojas de plátano cortadas a 25 centímetros c/u

Pabilo para amarrar

Aceite onotado para engrasar las hojas

Preparación del guiso

Saltea cebolla, cebollín, ajoporro, ajo en aceite previamente caliente, añade pimentones y ajíes, cuando suelten el olor agrega el resto de los vegetales y deja que suelten sus sabores y líquidos, añade sal, pimienta, y vino al gusto y deja cocinar bien.

Una vez el guiso vaya tomando cuerpo añade pasas, alcaparras y aceitunas picadas al gusto, luego mezcla el guiso con un poco de harina maíz y onoto para que tome color y consistencia.

Déjalo reposar hasta enfriar antes de usarlo.

Prepara la masa con agua tibia, sal y aceite onotado, hasta que tenga un color amablemente amarillo.

Limpia bien las hojas, extiende masa, coloca el guiso y los adornos y cierra la hallaca amarrándolas bien con pabilo.

Lleva al hervor por 35 minutos y retíralas del fuego dejándolas enfriar antes de servir.